Viajes
Si tienes colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn te preguntarás cómo va a afectar tu enfermedad en los viajes: el estar durante mucho tiempo en un coche, autobús, barco, tren o avión y que pasará cuando estés fuera de casa, en un lugar desconocido y con alimentos con los que no estás familiarizado.
Si estás en remisión, viajar no es un problema. Sin embargo, si estás en la fase activa de la enfermedad hay algunas cosas que tienes que planificar, sea cual sea el viaje que vayas a realizar.
Si tienes una enfermedad inflamatoria intestinal hay algunas cosas que puedes hacer que te ayudaran.
PLANIFICAR CON ANTELACIÓN
Medicamentos
- Lleva medicamentos suficientes para todo el viaje. Conseguir una receta en otro país puede ser complicado.
- Si tienes medicamentos que necesitan frio, guárdalos en una bolsa térmica que los mantenga frescos, que la puedes conseguir en una farmacia.
- Lleva una copia de tu receta (incluyendo nombres genéricos, ya que las marcas pueden ser distintas en los diferentes países) por si acaso necesitas más medicinas.
- Conserva el medicamento en el embalaje original para que sea fácil identificarlo.
- Lleva un botiquín de medicamentos como antidiarreicos, antiespasmódicos, suero de rehidratación oral y analgésicos. Habla con tu especialista de EII antes de comprar o tomar estos medicamentos.
- Utiliza pastilleros para llevar cantidades pequeñas de medicamentos que puedas necesitar durante el día para así llevarlos siempre contigo.
- Si viajas en avión, guarda tus medicamentos en el equipaje de mano por si se perdiera tu equipaje facturado. Con las restricciones actuales para el equipaje de mano deberás llevar un informe de tu especialista de EII que avale o justifique el tenerlos a mano. Es mejor que cuando reserves tu vuelo consultes con la compañía aérea y preguntes sobre las normas que tienen para el transporte de medicamentos en el equipaje de mano.
De tu especialista de EII
- Consigue un informe de tu médico que incluya tu historial y los fármacos que estás tomando. Esto será útil en el caso de que te hagan preguntas o en caso de emergencia y por si necesitas mostrársela a algún médico en el extranjero. Merece la pena llevar esta información traducida al idioma del país o los países que vayas a visitar.
- Pide a tu médico que te especifique por escrito un plan de acción que puedas seguir en caso de que empeore tu enfermedad mientras estas de viaje.
- Conserva a mano el número de teléfono de tu médico y la tarjeta de tu seguro en tu cartera.
Transporte y desplazamiento
- Averigua con anticipación si los autobuses y trenes que vas a utilizar tienen aseos. Cuando reserves tus asientos solicita uno junto al pasillo, cerca del baño.
- Avisa a la compañía aerea con anticipación para que pueda ajustarse a tus necesidades dietéticas o lleva tus propios alimentos.
- Lleva varios bocadillos y alimentos sencillos que puedas comer en caso de que la comida local no te venga bien.
- Consulta en internet y busca si hay información local o consejos que puedan servirte de otras personas que padezcan la misma enfermedad.
Revisiones de seguridad
Con los controles de seguridad que hay hoy en día en los aviones, en los barcos y trenes debes saber si puedes llevar tus medicamentos encima. Deberás estar preparado para enseñar tus pastilleros y medicamentos así como cualquier dispositivo médico.
En caso de que te sometieran a un registro manual (cacheo), te podrán detectar las bolsas adheridas a la piel (estomas) o cualquier dispositivo sanitario. Un informe de tu médico explicando tu enfermedad, tus medicamentos y cualquier dispositivo que puedas necesitar ayudará a aclarar tu situación.
Sé consciente de tu derecho a pedir que una persona cualificada esté disponible en el caso de que sea necesario.
¿Hay lugares a los que no debería ir?
Si estás planificando viajar a un país en vías de desarrollo, merece la pena consultar a un especialista en Medicina del Viajero en los centros o unidades dedicadas a ello. Después habla con tu especialista de EII antes de tomar la decisión final sobre visitar un lugar con esas características.
¿Qué debo considerar diariamente mientras viajo?
Experimentar una recaída de tu colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn no significa que no puedas salir del hotel, pero será útil si puedes planificar aspectos prácticos como son:
- Averigua dónde se encuentran los baños públicos. Puedes utilizar internet para hacerlo y si tienes un teléfono de última generación es posible que haya aplicaciones disponibles.
- En algunos países es posible obtener una tarjeta prioritaria que te da acceso a los aseos públicos y para discapacitados sin tener que hacer cola.
- Lleva papel higiénico o ropa extra por si surgiera algún accidente.
Vacunas
Como en cualquier plan de viaje, siempre asegúrate de tener las vacunas necesarias y medicamentos contra el paludismo.
Habla con tu médico (aproximadamente de 4-6 semanas antes del viaje planeado). Si decides utilizar un centro o clínica del viajero siempre habla con el médico sobre tu enfermedad. Si estás recibiendo tratamiento para tu EII también puedes necesitar vacunarte contra las siguientes enfermedades dependiendo de tu destino:
- Fiebre amarilla
- Hepatitis A
- Hepatitis B
- Cólera
- Rabia
- Meningitis meningocócica
- Encefalitis japonesa
- Tuberculosis
Si estás utilizando esteroides, inmunomoduladores o terapias biológicas para tu EII debes evitar algunas vacunas (contra la fiebre amarilla, el cólera y la tuberculosis) ya que dichos medicamentos pueden interaccionar con las vacunas. Siempre consulta a tu médico para saber qué vacunas son más convenientes para ti.
Si vas a realizar un viaje de larga distancia, habla con tu médico por si necesitas una inyección para evitar una trombosis venosa profunda (TVP).
Ten cuidado con lo que comas
Tienes que estar atento y prestar atención a lo que comes. Ten mucho cuidado con el agua de beber y utiliza siempre agua embotellada (incluso para cepillarte los dientes) y ten cuidado de no beber de forma accidental cuando te estés dando un baño o ducha. Evita el sushi, los vegetales crudos (incluyendo las ensaladas), el helado y los polos. Recuerda pedir bebidas sin hielo a menos que el hielo esté hecho de agua embotellada.
No hay problema en consumir vegetales cocinados y carne de establecimientos de confianza y limpios, y evita consumir los alimentos que se venden en la calle. Pela siempre la fruta antes de consumirla.
Seguro de viaje
Antes de viajar, asegúrate de que tu póliza sanitaria de viaje sea la adecuada y que cubre los problemas relacionados con tu EII. Por desgracia, muchas pólizas de seguros no cubren enfermedades preexistentes y probablemente no acepten dichos casos. Así que asegúrate de que tu póliza de viaje ofrezca una cobertura completa. También confirma que no estas viajando en contra de las indicaciones de tu médico.